Ejecutar una obra constituye un proceso muy exigente para el aparejador, pues las decisiones aparentemente más pequeñas desencadenan una serie de consecuencias que, en la medida que son previstas con una amplia perspectiva, derivarán en soluciones acertadas o no. De ahí la relevancia de realizar un control preciso y concreto de las diversas soluciones de cada proyecto, con objeto de poder alcanzar la meta final en unas condiciones óptimas para el proyecto.

  proyecta

Las diferentes escalas a las que se realiza el análisis afectan directamente a la calidad final de las obras y a las posibilidades de dar respuesta a las necesidades presentes o futuras que se puedan dar.

Por este motivo resulta imprescindible un trabajo de estudio intenso directamente relacionado con el desarrollo de las soluciones constructivas propuestas, además de una evaluación económica precisa, que permita una toma de decisiones ágil y sobretodo, acertada.

diseña

El conocimiento de los factores que se desencadenan en la cadena de toma de decisiones a nivel técnico, me permite, como aparejador, una evaluación precisa de posibilidades con objeto de encontrar las soluciones más equilibradas y convenientes en cada momento del proceso.

Planos Arquitecto David Maroto

 construye

La toma de decisiones sobre los diferentes procedimientos a seguir en cada fase de la obra, resulta crucial a la hora de encontrar una solución equilibrada y eficaz en todos los aspectos relacionados con la ejecución de una obra.
Cada momento exige una observación  amplia,  profunda y detallada, de las circunstancias externas e internas de cada solución. Un análisis exhaustivo y una toma de decisiones consciente de las consecuencias a posteriori, en las fases siguientes de la obra.
La elección de  los sistemas constructivos y de las posibilidades de ensamblaje a posteriori, permite potenciar la eficacia en el ámbito energético, constructivo y funcional de la edificación.
La calidad de los materiales de construcción garantiza las expectativas creadas en cuanto al óptimo funcionamiento de las soluciones constructivas ejecutadas. Encontrando así respuestas equilibradas a las demandas previas expuestas.
La situación de cada elemento dentro de las diversas soluciones constructivas que se llevarán a cabo dentro de una obra, permitirá optimizar su rendimiento, y garantizar su funcionamiento aprovechando la totalidad de las prestaciones que nos ofrezca cada material, cada solución constructiva, o cada sistema implantado durante la ejecución de la obra.
El replanteo en las diferentes fases de la obra resulta decisivo en la fase final, donde los acabados muestran con detalle los estándares de calidad utilizados en las fases iniciales de la obra.